Reseña: Revista Traytrayko

“¿Cómo era yo / antes que subiera el río?” Así terminan los últimos versos de la conmovedora revista literaria Traytrayko, proyecto que surge a partir de registros familiares y reflexiones entrelazadas del nütram  “Pu wirintukufe mapuche domo ñi trawün Ngulumapu mew”, actividad realizada en noviembre del año 2021, en la localidad de Cancura, Wallmapu.

La revista Traytrayko madura en el ciclo del rimü de la mano de Daniela Catrileo, escritora y profesora de filosofía, junto a Ange Cayuman, periodista y wirintufe. Ambxs integrantes del Colectivo Mapuche Rangiñtulewfü y de Yene Revista, gestionan y construyen un tejido de memorias que tienen como eje común la literatura mapuche y el territorio Traytrayko, conocido colonialmente como Nueva Imperial.

El texto reúne una antología de recuerdos individuales y colectivos, narrados por un  excepcional witral de voces, que componen una imagen viva de recuerdos, memorias y costumbres presentes en la nación mapuche. La actual edición está habitada con la participación de Yeny Díaz Wentén, Eliana Pulquillanca Nahuelpán, Roxana Miranda Rupailaf, Aliwenmalen, Jaqueline Caniguan, Ange Cayuman, Ramón Cayumil, Cristian Cayupan, Daniela Catrileo y Erwin Quintupil, más un registro de Pascual Coña.

La propuesta escritural inicia con una dedicatoria a “nuestros abuelos y abuelas” como homenaje a aquellxs que vieron en ese territorio las posibilidades de existir.  Así,  sus páginas atraviesan diversas formas textuales que juegan con la estructura de la palabra escrita. Tal como cuenta en ellas, la lamgen  Jaqueline Caniguan, “en la sociedad mapuche, acostumbramos a compartir la palabra, porque es a través de ella, como continuamos nuestras historias”. Desde ahí, parece interesante considerar la presencia de la oralidad cotidiana en los relatos, intervenidos con dibujos que complementan el mensaje colectivo, traspasando las fronteras de las escrituras, conformando una hermosa forma de resistencia a la rigidez de las clásicas tipologías textuales.

Vincular la memoria con las vivencias actuales de las naciones originarias, es una urgencia de registro para complementar el relato de la tradición escrita, no porque sea la única forma válida de sobrevivencia, sino porque se ha establecido como un territorio de bosques prohibidos para otras tradiciones, expandiendo como verdad única por medio de  monocultivos de la historia occidental blanca. El bosque interminable de la palabra escrita, es un registro filtrado por una mirada eurocéntrica que, entre otras cosas, ha podado pasajes hermosos de nuestros cuerpos, tradiciones y lengua: el mapudungún. Es así como este se hace presente entre las páginas, siendo fuente de conocimiento del pueblo mapuche. Aparecen nuevas historias como hojas que componen este paisaje, fertilizando verdades en las memorias familiares mapuche. Se hace presente el encuentro entre el mapudungun con el español de chile, evidenciando la diversidad de posibilidades enunciativas en las comunidades actuales.

Traytrayko, es un trabajo colectivo de siembra que fue acompañado por Jaqueline Caniguan en la traducción al mapudungun; Patricio Pradines Antillanca en la ilustración y diseño; Fernanda Aguero en la transcripción de los relatos orales; todo a cargo de la coordinación y revisión editorial de Ange Cayuman y Daniela Catrileo.

La Revista Traytrayko asume distintos desafíos. Por un lado, la necesidad de mantener y visibilizar prácticas ancestrales, que se mantienen hasta nuestros días, como el trawün, el epew y el palin. Por otro lado, se observa, en el recuerdo de la tierra, una necesidad de (re)pensar las historias que habitaron históricamente Traytrayko pero que, debido a los procesos de empobrecimiento y la violencia sistemática, provocaron una aceleración en la migración forzosa de las comunidades a diversas zonas urbanas. Finalmente, se define como una revista política puesto que, aunque suene compleja la denominación para algunos sectores, el solo hecho de asumirse en la actualidad como mapuche, es una postura política de resistencia al olvido que ha intentado establecer la cultura “patria”. Desde ahí la importancia de este bello territorio que surge y se resiste a un pasado inamovible por medio de sus letras, demostrando que existe un presente en el mundo mapuche que no es estático, sino más bien dinámico, vivo y reflexivo.

Por David (Vicho) Coñomán Romero